Buenas Tardes

Me permito dirigirme a Ud. como uno mas de sus lectores animado por su mensaje publicado este sábado 05/06/2010 en su Revista En Sociedad (ES).

Coincido plenamente con su manifiesta idea del valor de la palabra, y las dolorosas perdidas que ha tenido en el vertiginoso avance del mundo. Sin duda se han trastocado los valores y hoy el interés por el dinero prevalece ante la moral, las buenas costumbres, y la ética.

Pero, en realidad este escrito está motivado por el artículo de portada publicado en la Revista, sobre “Los Moreno” que a pesar de las excelentes gráficas padece de lo que en mi opinión personal es una pésima redacción y organización. En efecto al leer este confuso texto no encuentro las respuestas a que aluden los títulos. Lejos de ser informativo e involucrar al lector en los quehaceres de los entrevistados, parece ser un compendio de notas sin una conexión descifrable.

Ruego a Ud lea de forma objetiva y valorativa lo que salió publicado y me comunique si estoy equivocado en mi apreciación.

Siento ser tan despiadadamente crítico, pero al leer por otra parte sus palabras concateno la responsabilidad de quienes escriben para un público masivo. Creo que los periodistas tienen una importante cuota de responsabilidad en la cultura de un pueblo y en la forma en que este se expresa.

El periódico “Hoy” (del cual soy suscriptor) muestra en general una pobre calidad periodística signado por la política (excluyo su revista). Es evidente el desorden en la presentación de noticias. El diagramar deportes (donde casi la totalidad esta dedicada al baseball norteamericano) junto a unas escuetas noticias mundiales, que son copia textual y a veces protervamente recortadas de cables llegados de las agencias, dice de la poca importancia que se está dedicando a cultivar. Un capítulo aparte merecería la titulación o encabezados de las noticias, donde parece que no se dedica ni siquiera un minuto a pensar como lo entenderá el lector. Es evidente como están lapidando a uno de los más tradicionales y otrora importantes periódicos del país.

Me gustaría que personas como Ud. actuaran como “solucionistas” por sobre intereses e influencias que movidas por el afán de lucrar o por mantener un salario, olvidan dar lo mejor de sí y el fin último del quehacer periodístico que es “enseñar y dar ejemplo”.

No me gustaría que su bien lograda Revista se contagiara y sufriera de esta dolencia de calidad que hasta ahora no había visto.

Movido por sus palabras y en mi modesta acción “solucionista” solo puedo transmitirle mis inquietudes con la única intención de que se concientice hacia donde encaminan un bien que es de todos los ciudadanos.

Mis saludos cordiales y mis más sinceros respetos

Flavio Di Lorenzo